¿Alguna vez has probado una salsa que te haga exclamar “¡Quiero bañarme en esto!”? Pues déjame decirte que la Salsa de Aguacate es justo eso: cremosa, fresca y llena de sabor. Recuerdo la primera vez que la preparé para una cena con amigos. Todos se peleaban por el último trozo de pan para mojarlo en esta delicia verde. Desde entonces, no falta en mis reuniones familiares ni en mis comidas rápidas entre semana.
Un poco de historia sobre la Salsa de Aguacate
El aguacate tiene raíces profundas en la cultura mesoamericana, donde era considerado un alimento sagrado. En México, por ejemplo, el guacamole lleva siglos siendo un clásico. Sin embargo, la salsa de aguacate canaria tiene su propia magia, ya que combina ingredientes locales como el tomate verde y hierbas frescas. Yo misma descubrí esta versión durante un viaje a las Islas Canarias. ¡Qué maravilla probarla directamente allí, bajo el sol!
¿Por qué amarás esta receta?
La Salsa de Aguacate es increíblemente versátil. La puedes usar como salsa de aguacate para tacos, para nachos, o incluso como aderezo para ensaladas. Además, es rápida de hacer y perfecta para quienes buscan algo saludable pero lleno de sabor. Si nunca has probado una salsa de aguacate fácil y rápida, prepárate para enamorarte.
Ocasiones perfectas para preparar esta salsa
Imagina una tarde de fútbol con amigos, un picnic en el parque o una cena romántica. Esta salsa encaja en todas partes. ¿Una fiesta mexicana? Perfecta como salsa de aguacate para flautas. ¿Una cena elegante? Pruébala como salsa de aguacate para pasta. Incluso es ideal para esos días en los que solo quieres algo rico y rápido.
Ingredientes
- 2 aguacates maduros
- 1 limón (jugo)
- 1 diente de ajo
- Sal al gusto
- Pimienta negra recién molida
- 1 cucharada de mayonesa (opcional, para una salsa de aguacate con mayonesa)
- 1 cucharada de nata o crema agria (opcional, para una salsa de aguacate con nata)
- Cilantro fresco picado
- Tomate verde picado (para una salsa de aguacate con tomate verde)
Opciones de sustitución
- Si no tienes limón, usa vinagre de manzana.
- El cilantro puede ser reemplazado por perejil si prefieres un sabor más suave.
- En lugar de nata, prueba yogur griego para una versión más ligera.
Preparación
Paso 1: Preparando los aguacates
Comienza cortando los aguacates por la mitad. Retira el hueso y extrae la carne con una cuchara. Colócala en un tazón grande. Aquí es donde empieza la magia: los aguacates tienen un color verde intenso que promete cremosidad absoluta. Pro tip: Asegúrate de que estén maduros pero firmes para facilitar el proceso.
Paso 2: Mezclando los ingredientes
Aplasta los aguacates con un tenedor hasta obtener una textura cremosa. Agrega el jugo de limón para evitar que se oxiden y mantengan su color vibrante. Luego, incorpora el ajo picado, sal, pimienta y el cilantro. Si decides añadir mayonesa o nata, ahora es el momento perfecto. Mezcla todo hasta integrar bien. Huele ese aroma fresco… ¡ya casi está lista tu salsa de aguacate fácil y rápida!
Paso 3: Ajustando sabores
Prueba la salsa y ajusta la sazón según tu gusto. Si prefieres un toque picante, añade un poco de chile jalapeño picado. Chef’s tip: Para realzar el sabor, agrega una pizca de comino. Es una especia que combina muy bien con el aguacate.
Tiempos de preparación
- Tiempo de preparación: 10 minutos
- Tiempo de cocción: No aplica
- Tiempo total: 10 minutos
El secreto del chef
Para lograr una consistencia aún más suave, utiliza una licuadora o procesador de alimentos. Así obtendrás una salsa de aguacate para ensalada que parecerá salida de un restaurante gourmet.
Dato curioso
¿Sabías que el aguacate es técnicamente una fruta? Y no cualquier fruta, sino una baya con un solo hueso. Increíble, ¿verdad?
Herramientas necesarias
- Tazón grande
- Tenedor o procesador de alimentos
- Cuchillo y tabla de cortar
- Cuchara
Almacenamiento
Guarda la salsa en un recipiente hermético. Cubre la superficie con plástico adherente para evitar que entre aire, lo cual podría oscurecerla. En el refrigerador, durará hasta dos días.
Es importante recordar que el aguacate tiende a oxidarse rápidamente. Si notas que cambia de color, no te preocupes; sigue siendo seguro consumirlo, aunque pierde parte de su atractivo visual.
Si planeas usarla después de unas horas, guarda un poquito de jugo de limón aparte y rocíalo antes de servirla nuevamente. Esto le dará un brillo fresco y un toque cítrico extra.
Consejos y recomendaciones
Usa aguacates Hass para obtener la mejor textura. Son más cremosos y tienen un sabor más pronunciado. También puedes agregar un toque de miel si buscas algo dulce y salado.
Ideas de presentación
- Sirve en un cuenco de barro para darle un toque rústico.
- Decora con hojas de cilantro fresco o rodajas de limón.
- Acompaña con chips de maíz o palitos de zanahoria.
Recetas alternativas más saludables
- Versión vegana: Omite la mayonesa y usa yogur de coco.
- Baja en calorías: Reduce la cantidad de nata o elimínala completamente.
- Con proteína extra: Añade puré de garbanzos.
- Sin lácteos: Usa leche de almendra en lugar de nata.
- Picante: Incorpora chile chipotle picado.
- Dulce: Agrega un chorrito de jarabe de agave.
Errores comunes a evitar
Error 1: Usar aguacates inmaduros
Los aguacates verdes son difíciles de trabajar y no ofrecen la cremosidad deseada. Deja que maduren a temperatura ambiente antes de usarlos. Tip práctico: Coloca los aguacates en una bolsa de papel junto con una manzana para acelerar el proceso.
Error 2: Olvidar el limón
El limón no solo aporta sabor, sino que también evita que la salsa se ponga marrón. Nunca lo omitas.
Error 3: Sobremezclar
No quieras hacer puré perfecto si buscas una textura más rústica. Algunos trozos pequeños de aguacate pueden ser deliciosos.
Preguntas frecuentes
¿Qué se le pone a la salsa de aguacate?
Lo básico incluye limón, sal, pimienta y ajo. Pero también puedes agregar mayonesa, nata, tomate verde o cilantro para darle un toque especial.
¿Qué salsa se prepara a base de aguacate?
Además del famoso guacamole, existen variantes como la salsa de aguacate para pasta, tacos o ensaladas.
¿Qué especia va bien con el aguacate?
El comino es una excelente opción, así como el chile en polvo o el cilantro seco.
¿Cuál es la diferencia entre el guacamole y la salsa de aguacate?
El guacamole suele ser más grueso y contiene más ingredientes sólidos, mientras que la Salsa de Aguacate es más líquida y cremosa.
¿Puedo congelar esta salsa?
No se recomienda, ya que el aguacate pierde su textura al descongelarse.
¿Cómo puedo hacerla más espesa?
Añade menos líquido o incorpora un poco de queso crema.
¿Sirve como aderezo?
¡Claro! Prueba usarla en tus ensaladas favoritas.
¿Qué pasa si no tengo cilantro?
Puedes sustituirlo por perejil u omitirlo sin problema.
¿Es saludable?
Sí, es rica en grasas saludables y vitaminas esenciales.
¿Dónde encuentro aguacates buenos?
Compra aguacates Hass en supermercados confiables o mercados locales.
En resumen, la Salsa de Aguacate es un tesoro culinario que nunca pasa desapercibido. Ya sea que la uses como salsa de aguacate para nachos o como acompañamiento elegante, siempre será un éxito. ¡Manos a la obra y disfruta de esta maravilla verde!

Equipo
- tazón grande
- tenedor o procesador de alimentos
- cuchillo y tabla de cortar
- cuchara
- batidor
Ingredientes
- 2 aguacates maduros aguacates
- 1 limón (jugo) limón
- 1 diente ajo
- a gusto sal sal
- a gusto pimienta negra recién molida pimienta negra
- 1 cucharada mayonesa (opcional)
- 1 cucharada nata o crema agria (opcional)
- al gusto cilantro fresco picado cilantro fresco
- al gusto tomate verde picado (opcional) tomate verde
Instrucciones
- Corta los aguacates por la mitad, retira el hueso y extrae la carne con una cuchara.
- Aplasta los aguacates en un tazón grande hasta obtener una textura cremosa y añade el jugo de limón.
- Incorpora el ajo picado, sal, pimienta y cilantro. Mezcla bien.
- Ajusta la sazón al gusto, añadiendo más limón, sal o un poco de chile jalapeño si deseas.


