¿Alguna vez has probado una lasaña que te transporte directamente a la costa mediterránea? Recuerdo la primera vez que preparé esta receta de Lasagne Zucchini Feta. Estaba buscando algo diferente para una cena familiar y, sin querer, di con este plato que ahora es un clásico en mi cocina. No solo es delicioso, sino que también tiene ese toque fresco gracias a los ingredientes como el queso feta y las hierbas provenzales. Si quieres sorprender a tus invitados o simplemente disfrutar de una comida reconfortante, sigue leyendo.
Un viaje por los sabores mediterráneos
La combinación de calabacín, tomate y feta tiene raíces profundas en la cocina mediterránea. Este tipo de recetas se popularizaron en Italia y Grecia, donde los ingredientes frescos son protagonistas. En mi caso, decidí darle un giro más moderno al usar calabacines en lugar de carne y añadir queso feta desmenuzado para un toque salado. La primera vez que lo hice, mis sobrinos no paraban de repetir «¡Esto parece pizza, pero mejor!». Desde entonces, cada vez que quiero impresionar a alguien, recurro a esta receta.
¿Por qué te encantará esta receta?
Además de ser increíblemente deliciosa, esta Lasagne Zucchini Feta es fácil de preparar. No necesitas ser un chef profesional para lograr capas perfectas ni tener horas disponibles. Los sabores son suaves pero intensos, ideales para quienes disfrutan de platos equilibrados. Además, puedes adaptarla según tus gustos o necesidades dietéticas. ¿Lo mejor? Huele tan bien mientras se hornea que todos en casa querrán sentarse a la mesa de inmediato.
Ocasiones perfectas para preparar esta lasaña
Esta receta es ideal para cenas familiares, almuerzos dominicales o incluso para llevar a una reunión con amigos. También es perfecta si tienes invitados vegetarianos, ya que no lleva carne pero sigue siendo muy sustanciosa. Una vez la preparé para una cena romántica y, créeme, ¡funcionó a la perfección! El aroma y la presentación hacen que sea un plato digno de cualquier ocasión especial.
Ingredientes
- 4 calabacines medianos (1-1,2 kg), cortados finamente en láminas largas
- 400 g de tomates triturados (en lata o frescos)
- 1 cebolla mediana, finamente picada
- 2 dientes de ajo, laminados
- 200 g de queso feta, desmenuzado
- 250 g de ricotta fresca
- 150 g de parmesano rallado
- 10 hojas de albahaca fresca, picadas
- 1-2 cucharaditas de hierbas provenzales
- Sal y pimienta negra recién molida
- Aceite de oliva virgen extra
- 9-12 placas de lasaña precocidas
Opciones de sustitución
Si no tienes algunos de los ingredientes principales, no te preocupes. Aquí tienes algunas alternativas:
- Calabacín: Puedes reemplazarlo por berenjena o champiñones laminados.
- Feta: Usa mozzarella para una versión más suave o queso de cabra para un sabor más intenso.
- Ricotta: El requesón o incluso queso crema pueden funcionar bien.
- Hierbas provenzales: Si no las encuentras, mezcla orégano, tomillo y romero.
Paso 1: Preparar los calabacines
Corta los calabacines en láminas finas de unos 2-3 mm de grosor. Aquí tienes dos opciones: puedes dejarlos reposar con un poco de sal durante 30 minutos para eliminar el exceso de agua, o bien dorarlos rápidamente en una sartén con un chorrito de aceite de oliva. Yo prefiero la segunda opción porque les da un ligero toque dorado y crujiente que combina muy bien con el resto de los ingredientes. Reserva los calabacines mientras preparas el resto.
Pro tip: Si decides dorarlos, hazlo en tandas pequeñas para que no se amontonen en la sartén. Así evitarás que se cocinen en lugar de dorarse.
Paso 2: Preparar la salsa de tomate aromatizada
Calienta un poco de aceite de oliva en una sartén a fuego medio. Añade la cebolla picada y cocina durante 5-7 minutos hasta que esté transparente. Luego, incorpora el ajo y cocina por un minuto más, teniendo cuidado de que no se queme. Vierte los tomates triturados, agrega la albahaca, las hierbas provenzales, sal y pimienta. Deja que la salsa se reduzca durante 10-15 minutos hasta que espese un poco. Este paso es clave para que la lasaña tenga un sabor profundo y rico.
Paso 3: Preparar los quesos
En un bol, desmenuza el queso feta con un tenedor. En otro recipiente, mezcla la ricotta con un poco de sal, pimienta y una parte del parmesano rallado. Esta mezcla cremosa será la base perfecta entre las capas de lasaña. Me encanta cómo el queso feta le da un contraste salado y cremoso que complementa la dulzura de los tomates.
Paso 4: Precalentar el horno y armar las capas
Precalienta el horno a 180°C y engrasa ligeramente un molde para horno. Extiende una capa fina de salsa de tomate en el fondo. Coloca una capa de placas de lasaña, seguida de calabacines, una cucharada de ricotta, feta desmenuzado, un poco de parmesano y otra capa de salsa. Repite este proceso 2-3 veces hasta llenar el molde. Termina con una capa de placas, salsa generosa y una buena cantidad de parmesano rallado. Si queda un poco de feta, espolvoréalo por encima para darle un toque final.
Paso 5: Cocción
Hornea la lasaña durante 30-40 minutos hasta que esté dorada y burbujeante. Si notas que la parte superior se dora demasiado rápido, cubre el molde con papel aluminio durante los últimos 10-15 minutos. Cuando saques la lasaña del horno, deja que repose durante 5-10 minutos antes de servir. Esto permite que las capas se asienten y sea más fácil de cortar.
Chef’s tip: Para un brillo extra, rocía un poco de aceite de oliva sobre la superficie antes de hornear.
Tiempos de preparación
- Tiempo de preparación: 40 minutos
- Tiempo de cocción: 35 minutos
- Tiempo de reposo: 10 minutos
- Tiempo total: 1 hora y 25 minutos
El secreto del chef
Para darle un toque único a tu Lasagne Zucchini Feta, prueba añadir unas hojas de albahaca fresca justo antes de servir. Esto no solo mejora el sabor, sino que también le da un aspecto más fresco y apetitoso.
Dato curioso
¿Sabías que el queso feta es originario de Grecia y está protegido por una denominación de origen? Solo puede llamarse «feta» si se produce en ciertas regiones de Grecia. Sin embargo, hoy en día hay versiones similares en muchos países, así que no te preocupes si no encuentras el original.
Utensilios necesarios
- Sartén grande
- Molde para horno
- Cuchillo afilado
- Cucharón
- Papel aluminio
Cómo almacenar esta lasaña
Si te sobra un poco de Lasagne Zucchini Feta, no te preocupes. Es una receta que sabe aún mejor al día siguiente. Guárdala en un recipiente hermético en el refrigerador durante un máximo de 3 días. Para recalentarla, colócala en el horno a 150°C durante unos minutos o usa el microondas si tienes prisa.
Si quieres prepararla con anticipación, puedes armarla completamente y guardarla en el refrigerador hasta por 24 horas antes de hornearla. Esto es perfecto si tienes una cena importante y quieres ahorrar tiempo.
También puedes congelar la lasaña antes de hornearla. Envuélvela bien en papel film y guárdala en el congelador hasta por un mes. Cuando quieras comerla, descongela en el refrigerador durante la noche y hornea como de costumbre.
Consejos y recomendaciones
Para mejorar aún más esta receta, asegúrate de usar ingredientes frescos. Por ejemplo, el aceite de oliva virgen extra marca una gran diferencia en el sabor final. Además, no escatimes en hierbas frescas como la albahaca, ya que aportan un aroma único.
Otro consejo es no sobrecargar las capas. Si pones demasiado relleno, la lasaña puede quedar líquida y difícil de cortar. Mantén un equilibrio entre los ingredientes para obtener la textura perfecta.
Ideas de presentación
- Decora con hojas de albahaca fresca.
- Sirve con una ensalada verde al lado.
- Acompaña con pan de ajo casero.
- Espolvorea un poco más de parmesano antes de servir.
- Usa un molde rectangular para que las porciones sean más uniformes.
Recetas alternativas más saludables
Si buscas opciones más ligeras, aquí tienes algunas ideas:
- Versión integral: Usa placas de lasaña integrales para aumentar el contenido de fibra.
- Versión sin gluten: Busca placas de lasaña sin gluten en tiendas especializadas.
- Versión baja en grasas: Sustituye la ricotta por requesón bajo en grasa.
- Versión vegana: Reemplaza los quesos por alternativas veganas como tofu o levadura nutricional.
- Versión con espinacas: Añade espinacas frescas entre las capas para un toque verde.
- Versión con pollo: Incorpora tiras de pollo grillado si prefieres una opción con proteína animal.
Error común 1: Sobrecargar las capas
Uno de los errores más comunes al preparar esta Lasagne Zucchini Feta es poner demasiado relleno entre las capas. Esto puede hacer que la lasaña se desarme al cortarla o quede demasiado líquida. Para evitarlo, asegúrate de distribuir los ingredientes de manera uniforme y no exagerar con las cantidades.
Error común 2: No dorar los calabacines
Omitir el paso de dorar los calabacines puede resultar en una textura demasiado blanda. Este paso no solo mejora la textura, sino que también realza el sabor. Si tienes prisa, al menos sécalos bien después de dejarlos reposar con sal.
Error común 3: Hornear sin reposo
Es tentador cortar la lasaña inmediatamente después de sacarla del horno, pero esto puede arruinar la presentación. Deja que repose durante al menos 5-10 minutos para que las capas se asienten y sea más fácil de servir.
Pregunta frecuente 1: ¿Puedo usar calabacines congelados?
No es recomendable usar calabacines congelados, ya que suelen liberar mucha agua durante la cocción. Esto puede hacer que la lasaña quede demasiado líquida. Siempre opta por calabacines frescos para obtener los mejores resultados.
Pregunta frecuente 2: ¿Qué puedo hacer si no tengo hierbas provenzales?
Si no encuentras hierbas provenzales, puedes crear tu propia mezcla usando orégano, tomillo y romero. Estas hierbas son comunes en la cocina mediterránea y funcionan perfectamente en esta receta.
Pregunta frecuente 3: ¿Cuánto tiempo dura la lasaña en el refrigerador?
La Lasagne Zucchini Feta puede durar hasta 3 días en el refrigerador si se guarda en un recipiente hermético. Asegúrate de recalentarla adecuadamente antes de consumirla para disfrutar de su sabor óptimo.
En resumen, esta receta es un homenaje a los sabores mediterráneos que tanto me inspiran. Con ingredientes frescos, capas bien balanceadas y un toque de amor, estoy segura de que te enamorarás de esta Lasagne Zucchini Feta tanto como yo. ¡Manos a la obra y disfruta de una experiencia culinaria inolvidable!

Equipo
- Sartén grande
- Molde para horno
- Cuchillo afilado
- Cucharón
- Papel aluminio
Ingredientes
- 4 medianos calabacines cortados finamente en láminas largas
- 400 g tomates triturados en lata o frescos
- 1 cebolla mediana, finamente picada
- 2 dientes de ajo laminados
- 200 g queso feta desmenuzado
- 250 g ricotta fresca
- 150 g parmesano rallado
- 10 hojas de albahaca frescas, picadas
- 1-2 cucharaditas hierbas provenzales
- q.s. sal
- q.s. pimienta negra recién molida
- q.s. aceite de oliva virgen extra
- 9-12 placas de lasaña precocidas
Instrucciones
- Corta los calabacines en láminas finas de unos 2-3 mm de grosor y reserva.
- Calienta aceite de oliva en una sartén, añade la cebolla picada y cocina hasta que esté transparente.
- Incorpora el ajo y cocina por un minuto más.
- Vierte los tomates triturados y agrega albahaca, hierbas provenzales, sal y pimienta, reduciendo la mezcla durante 10-15 minutos.
- Desmenuza el queso feta y mezcla la ricotta con sal, pimienta y parmesano en otro recipiente.
- Precalienta el horno a 180°C y engrasa un molde para horno.
- Comienza a armar la lasaña: salsa de tomate, placas de lasaña, calabacines, ricotta, feta, parmesano, y repite hasta llenar el molde.
- Termina con una capa de placas, salsa y parmesano rallado.
- Hornea durante 30-40 minutos hasta que esté dorada; si se dora demasiado, cubre con papel aluminio.
- Deja reposar la lasaña 5-10 minutos antes de servir.